
Sábado, 8 de Febrero de 2025
Borondo erige un altar urbano en pleno corazón de Múnich con ‘Chrysalis’, una segunda piel para el Museo Villa Stuck
Icono del Simbolismo y del Art Nouvau, Franz von Stuck fue un artista total. Pintor, escultor, grabador y arquitecto, fue maestro de maestros como Kandinsky o Paul Klee, y a finales del siglo XIX erigió a orillas del río Isar, en pleno corazón de Múnich, Villa Stuck, su obra magna. El palacio, hoy Museo, encaja como un guante en lo que Wagner definió como Gesamtkunstwerk (una obra de arte total): allí Von Stuck, uno de los impulsores del rupturista movimiento de Secesión, diseñó absolutamente todo, desde los planos iniciales hasta la decoración interior, incluidos los muebles o los frescos que cubren las paredes. Así ha permanecido desde su inauguración en 1898 hasta hoy sábado, cuando el artista Gonzalo Borondo, nacido en Valladolid y criado y afincado en Segovia, ha vestido su fachada con una segunda piel.