Concha Ortega /ICAL - El consejero de Cultura, Deporte y Turismo, Gonzalo Santonja, presenta la restauración de las pinturas de la ermita de San Saturio
SORIA - CULTURA
Martes, 1 de Octubre de 2024

Santonja: “Asistimos al renacimiento de la ermita de San Saturio”

ICAL - El consejero de Cultura visita las obras de restauración de las pinturas del monumento más visitado de Soria, que aplicará tarifa a los turistas por la visita

El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, significó hoy que Soria asiste, en la víspera del día de su patrón, “al renacimiento de la ermita de San Saturio”, tras el final de la restauración de las pinturas murales en la capilla del santo, que han movilizado un millón de euros de las arcas autonómicas. 

Este templo barroco colgado sobre un roquedal junto al río Duero y el Monasterio de San Juan de Duero, son los monumentos más visitados de la provincia de Soria. En concreto, se estima que son 60.000 las personas que visitan anualmente el templo erigido en honor al santero, ícono de la ciudad.

“La intervención era imprescindible y necesaria. Estoy muy satisfecho con la intervención definitiva, que garantiza el estado magnífico de San Saturio para futuras generaciones. La obra ha sido extraordinario porque se han creado cámaras para evitar las humedades y se han restablecido todos los retablos”, argumentó.

El Obispado de Osma-Soria y el Ayuntamiento de la capital analizan, tras la restauración del templo, cobrar ya, a los turistas, por visitar la ermita con el objetivo de que la recaudación sirva para el mantenimiento de este templo.

El consejero, junto con el obispo, Abilio Martínez Varea y el alcalde de la ciudad, Carlos Martínez visitaron hoy los trabajos realizados que han permitido, incluso, recuperar pinturas cuyos dibujos no eran visibles a los ojos por el mal estado de conservación en las que estaba debido a la humedad y a la filtración de agua desde las rocas.

Desde finales de 2019, la Consejería de Cultura y Turismo a través del Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León, viene desarrollando una serie de estudios en la ermita para determinar el estado de conservación y los agentes de deterioro que están afectando las pinturas. Para ello, el consejero detalló que se han llevado a cabo análisis para determinar la composición de los materiales de las pinturas murales de la ermita y recabar información de las actuaciones realizadas a lo largo del tiempo.

A partir de los datos obtenidos, se han implementado una serie de medidas de conservación preventiva que incluyen la monitorización del inmueble, lo que ha permitido registrar datos de temperatura, humedad, intensidad lumínica y concentración de CO2, tanto en el interior como en el exterior. El seguimiento de la monitorización se está realizando desde noviembre de 2021.

Santonja explicó que dos han sido las principales causas del deterioro constante que han sufrido las pinturas murales. La acción humana a lo largo de la vida material de este bien ha sido causa directa de deterioros, con intenciones casi siempre conservativas y con resultados más o menos acertados. Todo esto es principalmente consecuencia de las intervenciones de restauración que se llevaron a cabo en los años 1940 y 1977.

A esto se suma la ubicación de la propia ermita, en una zona escarpada, a media ladera, lo que ha ocasionado una alta exposición a problemas climáticos.

La restauración ha abarcado sus paramentos pintados y el conjunto de bienes muebles que conforman la imagen de conjunto interior de esta ermita. En concreto, se ha solucionado el problema de la linterna con la realización de una nueva cubierta y reintegrado sus pinturas con un efecto identificativo de esta actual intervención. “Se ha limpiado la superficie pictórica para recuperar su colorido original y se ha dado una solución novedosa al problema de filtraciones en la cúpula por su contacto con la roca del cortado, creando una cámara que separa los morteros pictóricos de esa fuente de humedad”, detalló.

Por otra parte, se ha intervenido también de forma integral en la sacristía y en todos los retablos, incluido el retablo mayor con la figura de San Saturio y se ha actuado en las vidrieras de los ventanales de los paramentos y linterna para generar la adecuada ventilación que permita minimizar los problemas de humedad en el interior del templo.

Por último se ha renovado el sistema de iluminación adecuándolo a las necesidades de los bienes y optimizando su consumo energético. La intervención ejecutada por la Consejería ha tenido un coste total de casi 1.000.000 euros. Tanto el Ayuntamiento como el Cabildo están colaborando en esta intervención integral con el repaso de cubierta, reparación de la cubierta de la linterna, adecuación de los accesos e iluminación exterior. El consejero recordó que la acción coordinada de todos, Ayuntamiento, la Diócesis y la Junta, debe servir para reconocer e impulsar las enormes posibilidades que estos recursos culturales ofrecen como herramientas para el bienestar de las personas y muy especialmente su creciente capacidad de generación, de empleo y de desarrollo.

En 1694, la ciudad de Soria acordó reedificar una iglesia de nueva planta con el concierto de todos los vecinos colgada sobre un roquedal junto al Duero.

El edificio fue diseñado por el arquitecto Pedro Ajín y la construcción fue ejecutada por Julián Domínguez Izaguirre. Se trata de un edificio barroco de planta octogonal, enmarcada en un óvalo, cubierto con una cúpula de ocho plementos y linterna. En los frescos de sus paredes está representada la historia de San Saturio. En dos de sus paños se puede contemplar la silueta del castillo de Soria, tal como estaba antes de su destrucción. En el retablo mayor de este estilo barroco se encuentra el relicario de San Saturio, con su gusto del siglo XVII. En la bóveda con linterna, los frescos representan a santos ermitaños, entre ellos San Juan Bautista, San Juan Evangelista, San Benito y el propio Jesucristo en el desierto. Esta obra fue realizada por Juan Zapata Ferrer entre los años de 1704 y 1708, el pintor soriano del barroco más destacado.

Cobrar por entrar

El Ayuntamiento de Soria y el Obispado de Osma Soria han decidido que, en los próximos meses, se establecerá una tarifa por entrar a la ermita con el fin de que lo recaudado pueda destinarse al mantenimiento del templo. De momento, no se conoce la tarifa pero sí es previsible que los empadronados en la ciudad no paguen por entrar en un templo que dispone de culto religioso. 

Está previsto que mañana, día del patrón, se celebre la Eucaristía a las 8, a las 9 y a las 10 horas de la mañana.