El Museo Diocesano de Zamora acoge desde hoy la exposición temporal ‘Cobres pintados en la diócesis de Zamora’, que hace un recorrido por la pintura al óleo sobre lámina de cobre, una de las técnicas pictóricas “más singulares y delicadas” de los siglos XVI y XVII.

La muestra, promovida por la Delegación Episcopal de Cultura, Patrimonio y Sociedad, se enmarca en el jubileo ordinario de 2025, proclamado por el papa Francisco como ‘Jubileo de la Esperanza’. 

La inauguración contó con la participación del obispo de Zamora, Fernando Valera, y del técnico del Museo Diocesano, el historiador del arte Manuel Benito Ramos, quienes destacaron el “valor artístico, catequético y simbólico” de la muestra.

El comisario de la exposición ha sido José Ángel Rivera, canónigo de la Santia Iglesia Catedral y doctor en Historia del Arte, “artífice de la idea y responsable de la cuidada selección” de obras. “La muestra es una invitación a contemplar la historia de la salvación y de la vida de la Iglesia a través de la belleza serena y vibrante del arte sacro”.

La exposición reúne 16 obras pertenecientes a parroquias, comunidades religiosas y al propio Museo Diocesano. Aunque fueron creadas, en su mayoría, en los siglos XVII y XVIII, “mantienen una intensidad cromática y una delicadeza técnica que sorprenden, aún hoy”, según recalcó Rivera de las Heras.

“Estas piezas reflejan escenas del Antiguo Testamento, episodios evangélicos y figuras de santos y muchas de ellas son copias de grabados europeos basados en composiciones de grandes maestros”, añadió.

José Ángel Rivera incidió en que las pinturas eran “habituales” en los ámbitos domésticos y en espacios de recogimiento. “Su soporte metálico les confería gran durabilidad, aunque también las hacía vulnerables a daños físicos. Los marcos, muchos de ellos, negros tallados o ebonizados, refuerzan su carácter de obra de gabinete”, precisó.

La podrá visitarse en el Museo Diocesano de Zamora, ubicado en la iglesia de Santo Tomé, de lunes a sábado, de 10.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00 horas, y los domingos y festivos, de 10.00 a 14.00 horas. La entrada cerrará quince minutos antes de la hora de clausura.

En palabras del papa Francisco, citadas en el catálogo de la muestra, “la contemplación de las obras de arte permitirá atesorar experiencias y culturas diferentes, para conservar dentro de sí la belleza que, armonizada por la oración, conduce a agradecer a Dios por las maravillas que Él realiza”.